Trump incumple su promesa electoral y aprueba la venta de US Steel a intereses japoneses
Nippon Steel ha adquirido la totalidad de US Steel por 14.900 millones de dólares, tras meses de negociaciones con Washington. Con esta operación, la siderúrgica japonesa se convertirá en el cuarto productor mundial de acero.
¿Un salvavidas para US Steel?
La adquisición del rival de Nippon Steel se anunció por primera vez en 2023. Se consideró un balón de oxígeno para US Steel, que había sufrido décadas de declive desde los años de posguerra.
Una vez símbolo de la dominación industrial americana
La que fuera la empresa más valiosa del mundo, US Steel, ha sido considerada durante mucho tiempo un símbolo del dominio industrial estadounidense. Fue la primera empresa en valer 1.000 millones de dólares, poco después de su creación en 1901.
Bloqueado por Biden
El acuerdo había sido bloqueado previamente por motivos de "seguridad nacional" por el ex presidente estadounidense Joe Biden en sus últimas semanas en el cargo.
Trump cambió de opinión tras las concesiones de Nippon Steel
Donald Trump también se había opuesto al acuerdo durante su campaña electoral, ya que la sede de U.S. Steel se encuentra en el políticamente estratégico estado de Pensilvania. Sin embargo, Trump dio marcha atrás tras nuevas concesiones de la empresa japonesa.
11 000 millones a finales de 2028
Para obtener la aprobación del presidente Trump, Nippon Steel tuvo que comprometerse a invertir 11.000 millones de dólares hasta finales de 2028, de los cuales 2.700 millones ya están en marcha.
Washington tiene voz en la gestión de la empresa
El acuerdo también acuerda que el gobierno estadounidense pasará a controlar varias decisiones clave de gestión. En concreto, tendrá poder de veto sobre cualquier decisión de cerrar una planta o reducir la producción o la plantilla.
Puestos clave reservados a los estadounidenses
Nippon Steel ha prometido que la mayoría de los puestos del consejo de administración y de los principales cargos directivos de U.S. Steel serán ocupados por estadounidenses.
Un senador de Pensilvania celebra el acuerdo
El senador republicano por Pensilvania Dave McCormick calificó la compra de "victoria masiva para las familias trabajadoras, nuestra economía, nuestra seguridad nacional y el futuro industrial de Estados Unidos".
El sindicato metalúrgico se opone al acuerdo
El sindicato metalúrgico (USW) sigue oponiéndose al acuerdo: "Quizá se mantenga el histórico logotipo USS, pero parece que no será más que una cortina de humo para permitir que una filial privada de propiedad total de una corporación japonesa se llame estadounidense" La organización también critica el "sorprendente grado de poder personal [obtenido por Donald Trump] sobre la empresa".